Antes de todo me gustaría explicar que es una Mudra.
Las personas que meditan o hace yoga deberían aprender las mudras. Porque todo este nuestro "mundillo" de crecimiento personal y desarrollo interno es muy complejo. Y para que todo esta unido tenemos que trabajar en equilibrio entre el cuerpo y mente.
En este caso los mudras usamos en la practica de yoga, meditación pero también cuando andamos, antes de dormir y otras situaciones que nos permiten. ¿Pero que es Mudra?
Es cada una de las posiciones que se realizan generalmente con las manos. Es un gesto, considerado sagrado por quienes lo realizan. Mudra en sanscrito quiere decir "sello", y nos permite concentrar la energía o hacer contacto con una energía en particular.
Ganesha mudra nos ayuda a romper los obstáculos, relacionado directamente a la salud, sistema inmune, pero sobre todo a la fuerza de voluntad.
Este mudra, por ejemplo, te lleva a conectar con tu ser interior para despertar tu energía interna, genera confianza en ti mismo y te ayuda a encontrar el coraje para superar cualquier cosa que te impida avanzar.
Su nombre hace honor al dios hindú Ganesh, quien es considerado el eliminador de obstáculos. Además, se cree que esta deidad a veces pone obstáculos en el camino para que las personas puedan ganar fuerza al vencerlos.
Ganesh Con su cabeza de elefante y su enorme cuerpo glotón, Ganesha es una de las divinidades más veneradas en la vida cotidiana. Se dice que todo le sale bien a quien se coloca bajo la protección de este dios benevolente. De su infancia, Ganesha conservará el papel de guardián de las puertas; el dios elefante es el dios de las transiciones. También es el señor de los obstáculos; los hindúes le rinden homenaje antes de cualquier nueva empresa, para que los ayude a superar las inevitables dificultades. ¡Su cuerpo gordo, símbolo de prosperidad, solo puede ser de buen augurio! Con las manos colocadas a la altura del pecho y los dedos doblados e imbricados, el mudra de Ganesha nos hace separar los codos a la vez que mantenemos los dedos unidos; al hacerlo, se ensancha el espacio del corazón. Se dice que este movimiento disipa el miedo y calma las tensiones, a la vez que favorece el entusiasmo y la perseverancia. Unos beneficios propicios para la materialización de un proyecto o simplemente para empezar una nueva jornada. En la filosofía del yoga, Ganesha, debido a que tiene una cabeza de elefante (inmensidad) colocada sobre un cuerpo de hombre (individualidad), simboliza la unidad fundamental del macrocosmos y el microcosmos. El ser humano, contenido en el cosmos, contiene en él al cosmos; al conocer su alma individual, el yogui conoce también el alma universal. El reconocimiento de esta unidad es uno de los principios clave del yoga: «Sin ser consciente de ello, sin venerar a Ganesha, no es posible ninguna realización», dice el indianista Alain Daniélou. Se dice que el elefante tiene el poder de comunicar fuerza, valor y resistencia; el mudra del dios de cabeza de elefante materializa estas cualidades. Sea cual sea la puerta que hay que cruzar, a la salida o a la llegada, el yogui encontrará a Ganesha apostado en el umbral, para incitarlo a perseverar.
Coloca delante del pecho la mano izquierda con la palma girada hacia fuera. La mano derecha hace un gancho con los dedos de la mano izquierda manteniendo el dorso girado hacia el frente. Mantén el mudra muy cerca del pecho, a la altura del corazón, tirando de las manos en sentidos opuestos especialmente con cada exhalación.
Así, con base en este simbolismo, el mudra de Ganesha se considera una forma de obtener un fortalecimiento energético y físico para el corazón.
Practicado por lo menos durante un minuto, hasta 5 minutos, sin dejar de respirar profundamente y ejercer en todo momento presión hacia afuera.
