Desde mucho tiempo una de mis meditaciones favoritas es conectar con nuestros cinco elementos. Son los elementos que podemos encontrar fuera y dentro de nuestro cuerpo. Tierra, agua, aire, fuego y éter. Y conectas muchísimo mas cuando haces las meditaciones al aire libre.
Toda la materia, incluido cuero físico y sutil, contiene la energía de los elementos. Los cinco elementos se encuentran en el centro de los cinco primeros chakras.
Puesto que los elementos son manifestaciones físicas del temperamento, pueden ser instrumentos potentes y tangibles en el proceso de sanación. Cada uno tiene su correspondiente facultad sensorial, olfato, sabor, vista, tacto sonido.
Cuando identificas lo que no está en equilibro es sencillo encontrar la técnica de sanación. No obstante comprender lo que hace falta y por qué, es lo que exige mucha percepción.
Elemento Tierra - se sitúa en primer chakra. Este elemento es coma la propia tierra, denso, rígido, y principalmente inmóvil. Es solido, aporta una base de apoyo tiene la propiedad de nutrir para que las cosas pueden florecer. Esta conectado con el olfato, un sentido muy primario que utilizamos para saber si las cosas están en orden o no. El elemento tierra aporta una estructura rígida al cuerpo y la vida.
Elemento Agua - se sitúa en segundo chakra. Es un elemento muy adaptable y representa la capacidad de fluir. Transporta nutrientes a todas las partes del cuerpo e hidrata, y se asocia al sentido del gusto. El agua representa la capacidad para cambiar de idea, para moverse y para fluir con la vida. Es uno de los mas abundantes elementos en nuestro cuerpo. Y puede tener diferentes formas (porque adapta la forma de recipiente, o puede tener formato solido, liquido, gaseoso). Que en este caso significa que absorba energía de lo que le esta afectando. Los sentimientos, igual que el agua, adoptan la estructura y la energía de aquello que los ha creado. Y también con agua podemos limpiar todo lo que no deseamos, incluidos los pensamientos negativos.
Elemento Fuego - se encuentra en la tercera chakra. El fuego es el responsable de la digestión y se asocia tanto a la creación como a la destrucción, aunque más a la destrucción. Esta conectado con el sentido de la vista, aporta las cualidades de la fuerza de voluntad, la concentración y la determinación. Lo hace destruyendo todo lo que es secundario en la vida de una persona. La destrucción es un proceso vital para el bienestar, ya que elimina todo lo que ya no es útil en la vida. El fuego tiene la capacidad de transformar. Físicamente, dirige los alimentos y los transforma en energía y nutrientes. Y sutilmente, el fuego se usa para destruir pensamientos y deseos, que en resumidas cuentas son el origen de cualquier materialización.
Elemento Aire - se encuentra en el cuatro chakra. Se asocia al sentido del tacto. El elemento aire es importante para la vida por su prana y por su ligereza intacta. El aire también esta vinculado con el pensamiento y con el modo en que éste se desplaza por el cuerpo. Si no seria por aire, los pensamientos no se podrían mover ni llegar a manifestarse. Un exceso de aire puede provocar trastornos mentales, como el exceso de pensamientos y la preocupación. El elemento aire es muy importante para la expansión y el crecimiento personal, pero ha de estar compensado con los elementos tierra, agua y fuego para que la vida sea productiva e interesante.
Elemento Éter - se situada en quinto chakra. El chakra de garganta. El éter es conocido también como espacio. El espacio se puede doblar y estirar, por eso es la esencia básica de la cual se ha creado todo lo demás. El universo entero ha sido creado a raíz de una corriente de sonido. El sonido es un aspecto de la frecuencia vibracional que da lugar a todo lo creado.
